Ingeniería que entiende el presente para no improvisar el futuro
“No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que mejor se adapta al cambio.” — Charles Darwin
Spoiler: el cambio no espera a nadie. Ni a ti.
Esto no es ciencia ficción. Es martes.
La inteligencia artificial no está por venir. Ya vino, saludó y se puso a trabajar. Y mientras unos siguen discutiendo si esto es una moda o una amenaza, el mundo —el real, el de las decisiones— ya está girando con otro motor.
Yo soy Miguel (el de la foto, si). Ingeniero, más de 14 años dándole al desarrollo de producto y la simulación. Y no vengo a darte lecciones. Vengo a compartir lo que he tenido que aprender a toda prisa para no quedarme atrás.

Porque sí, yo también empecé con ChatGPT como quien prueba una app de moda. Pero algo cambió. Empecé a ver que esto no era un juguete. Era una nueva forma de pensar, de decidir y de hacer.
Hoy uso la IA como sistema operativo mental. Me ayuda a analizar, a construir, a resolver. A trabajar mejor, y con más cabeza. Y por eso creé Disimulando.
Aquí no dramatizamos. Iluminamos.
La IA no es cosa de otros. Es cosa tuya si trabajas con datos, con procesos o con decisiones. Y si no la entiendes —si no la haces tuya— alguien lo hará por ti.
Disimulando no es un canal de hype ni un templo de gurús. Es una linterna encendida en medio del túnel. No para decirte por dónde salir, sino para que no camines a oscuras.
No hay que ser experto. Hay que empezar.
Aquí no hablamos de teoría. Hablamos de cómo usar la IA para hacer mejor lo que ya haces como ingeniero. Para pensar con más foco, automatizar lo que agota, ganar tiempo y claridad.
No son promesas grandes. Son cambios pequeños que, juntos, marcan la diferencia.
Porque esto no es solo técnica. Es cultura. Es política. Es vida.
La IA está reordenando todo: cómo trabajamos, qué valoramos, quién decide. Y quedarse fuera del debate no es neutral. Es un riesgo.
Por eso aquí también se habla de renta básica, de ética, de derechos digitales. Porque si los ingenieros no hablamos de esto, otros lo harán por nosotros.